La etanolamina forma parte de los fosfolípidos de las membranas celulares.
Investigadores del Centro de Astrobiología la han detectado por primera vez en el espacio interestelar, en una nube molecular de nuestra galaxia, lo que puede ayudar a entender la evolución de la capa protectora de las primeras células.
La etanolamina, un componente de los fosfolípidos que constituyen la membrana celular, ha sido detectada en una nube molecular de nuestra galaxia, y podría haber sido transferida a la Tierra primitiva a través de asteroides.
El descubrimiento de esta importante molécula prebiótica se ha producido concretamente en la nube molecular G+0.693-0.027, situada cerca del centro de nuestra galaxia, utilizando para ello el radiotelescopio IRAM de 30 metros de diámetro de Pico Veleta (Granada) y el de 40 metros del Observatorio de Yebes (Guadalajara).
Estos resultados sugieren que la etanolamina se sintetiza eficientemente en el espacio interestelar en nubes moleculares donde se forman nuevas estrellas y sistemas planetarios.